27.9.05

El "clic"

Cuando recién conoces a alguien, por default no sabes nada de esa persona. Así que los impulsos a los que reaccionas de entrada para decidir si alguien te gusta o no, son meramente físicos. No hay de otra, es el proverbial tilín. También conocido como "clic".

O te hace o no te hace. Por eso es que dicen que la primera impresión es la que cuenta. La primera impresión es definitivamente importante porque es el insumo con el que tu cerebrito genera muchas conclusiones, mucho antes de verificar si esas conclusiones son correctas o no. El cerebro tiende a llenar los huecos de información que requieres, y con ello se te facilita la toma de decisiones.

Por ejemplo, digamos que te llama la atención una persona. Sus ojos en particular. En cuanto tus ojos vieron los suyos dijiste de aquí soy. O algo por el estilo. Así que aplicas las reglas que decía el Verde en su post anterior y te acercas (o dejas que se te acerquen, cada quien tendrá su estilo de ligar). Como algo de esta persona ya te gustó, vas a estar mucho más receptivo a los puntos positivos que tenga ese primer encuentro. Podrías pensar cosas del estilo de: "tiene hermosos ojos y además cuenta buenísimos chistes", o "tiene bonitos ojos y además ha visto las mismas películas que yo últimamente". Y si la atracción es intensa, entonces incluso podrías llegar a minimizar los detalles más negativos de ese primer encuentro. Como podría ser el detalle de que esta persona no parezca tener puntos de vista en común con los tuyos, o bien, que tenga boquita de trailero (que diga muchas groserías, pues).

Es importante recalcar que dicho encuentro se realizó después de que hubo una atracción inicial. En el mejor de los casos puedes encontrar atracción mutua y continuar la convivencia de tal modo que puedas ir conociendo más a la persona que te atrajo y ver si hay puntos de coincidencia que podrían usarse para basar una relación, independientemente del clic.

Por el otro lado, si la atracción no es mutua, siempre puedes regresar a sí fijarte en los detalles negativos, como puede ser un "tan guapo y tan menso", qué lástima. E irte.

Más interesante aún se me hace la falta de tilín. Al parecer podrías encontrar una relación increíble con alguien, pero si no hay tilín, muchos escogen que no haya nada.

Hace mucho tiempo me contaron una grandiosa historia de amor entre mi compañera de piso (uruguaya) y su mejor amigo. Me dijo que eran inseparables y que se tenían un amor tan puro que era indescriptible. Que todos los que los conocían opinaban que era una maravilla el que se hayan encontrado y esperaban boda pronto.

Tiempo después, en un fin de semana con amigos, ellos dos llegaron antes que el resto de los amigos y una cosa llevó a la otra y pues acabaron acostándose. Y mi amiga dijo que la incompatibilidad sexual fue terrible. Espantosa. Y que los decepcionó tanto a ambos que ahí mismo decidieron que sea lo que fuera que tuvieran entre ellos que nunca iba a llegar a ser una relación. "Lástima, me decía ella, porque él hubiera sido un excelente padre para hijos que nunca tuvimos".

Y entonces el riesgo se centra en que en la búsqueda de pareja, puedes ir dejando pasar personas que podrían ser increíbles parejas, pero que nomás no te hacen clic. Como diría mi hermana, "no es que no me guste, es que no me veo dándole un beso".

Claro que aún habiendo clic nada te garantiza que de ahí salga una buena relación. Una buena relación sexual, tal vez. Pero luego se te antoja más buscar cariño que revolcones y le asignas más valor a una conversación que a la pareja "eye candy".

Y finalmente, aunque dejes pasar a personas que no te llaman la atención y que potencialmente sean buena pareja, la garantía está en que encuentras tarde o temprano a alguien que cumple con todo, atracción siendo únicamente uno de los componentes.

2 comments:

María José Schamun said...

Parece algo así como el diagrama de Ben: en el Universo de los hombres está el conjunto de los padres perfectos y el de los que nos hacen click, ambos están en intersección (la cual es una parte pequeñísima)y de ahí salen las relaciones más duraderas... No?
Bueno, ya divagué mucho.
Besos y me encantó su Blog!!!

Gerson Obrajero said...

chale... creo que es básica la primera impresión, es el boleto de entrada a relacionarte con alguien.

Despues ya viene las cosas extra-click, como el platicar con alguien, qué ideas tiene de la vida, de qué vive y pues ya viene la decisión, si cortas por lo sanoo te das la chance.

Claro, si buscamos cosas perfectas, nos equivocamos de planeta, no hay galanes, galanas, parejas, noviagos o matrimonios perfectos.. eso hay que tenerlo presente.. ya cualquier chava quiere de un Brad Pitt pára arriba ;)

Saludos