De la realidad, la cruel realidad

Mientras leía el último post de Alice, también leía en paralelo una pagina que me encontre en un blog de sexo que se hace llamar la iglesia de la realidad.

A que viene esto. Resulta que el sábado fui a una boda. Y todos estos elementos, el comentario de Alice sobre las almas gemelas, el blog de sexo en si, la iglesia de la realidad y las bodas se fusionaron en una idea compleja que intentare desenredar a continuación.

Según parecemos expresar, tanto Alice como Yo estamos de acuerdo en que el estado mas adecuado del hombre y de la mujer es el de estar en pareja, notese que insisto aqui sobre la idea de que somos seres completos. Sin embargo ambos estamos sesgados y parece que todo el mundo lo esta también con respecto a la idea de que lo correcto es encontrar UNA pareja y que a partir de alli lo que sigue es trabajar sobre esta pareja, con el consabido camino de la boda para formalizar nuestro empeño.

La novia que se estaba casando el sabado, fue en algún tiempo la novia de uno de mis mejores amigos, mismo que no estuvo invitado a la boda, y durante el tiempo que estuvieron juntos, eran la pareja contemporanea a la que yo mas fe le tenía para durar millones de años. El sabado comprobó claramente una vez mas que no solo no tengo telepatía sino tampoco el poder de predecir el futuro. Sin embargo durante el año y medio que duro la relación que sostuvieron estoy seguro que en mas de una ocasión se sintieron perfectos y perfectamente enamorados el uno en los brazos del otro.

Ok, hasta aqui espero no haberlos perdido. Mientras leía todo el choro de la iglesia de la realidad, que básicamente dice que debemos de creer en lo que es real, y buscar acercarnos a la realidad lo mas posible, sin embargo, esto es difícil lograr dado que nuestras ganas de pertenecer (a un grupo social dado) son mucho mayores que nuestra capacidad para comportarnos racionalmente. El caso es que mientras leía eso, me preguntaba porque la gente seguía casandose a pesar de que en los últimos años ha quedado claro que esa no es la salida que mejor le conviene al amor romántico (el tema de la familia es punto y aparte, insisto). Si se cuentan los divorciados mas los infieles, el 75% de los matrimonios terminan en el fracaso (la fidelidad todavía se mantiene como una de las supuestas bases del matrimonio y las parejas hasta la eternidad)

Y entonces vino la iluminación. Cuando TODA la manada cree que la única manera de que la pareja pueda llegar a la culminación real es si aguanta lo suficiente como para decidir comprometerse de por vida, los que no CREEN lo mismo son excluidos del grupo y socialmente dados por muertos. Por eso se casa la gente, no importa si cada vez queda mas claro que el matrimonio no sirve, si no te casas estas fuera de la manada.

Tenemos que empezar a pensar soluciones alternativas al cuento del alma gemela y el principe azul (ambas marcas utilizadas bajo autorización de sus respectivos dueños).

Y tenemos que aprender a darle su justa importancia a todas nuestras parejas a través del tiempo, dado que todas nos ayudan a construir lo que somos el día de hoy.

En ese sentido, siempre llevaremos con nosotros hasta la eternidad a todos nuestros amores.